martes, 8 de octubre de 2019

de la experiencia

Dice una canción interpretada por José José: es mentira, no existe la experiencia en el amor; es mentira, yo diría, que un niño sabe amar igual que yo, o un pájaro. Y aunque a simple vista pueda parecer una perogruyada, en realidad es una verdad abrumadora; o a mí me lo parece. Porque a pesar de que una gran parte de la gente se empecine en señalar que con cada mala experiencia aprenden (y crecen y no sé cuántas cosas más), y, por tanto son mejores; mejores que el dia anterior, mejores que el año pasado, en realidad es una pancarta vacía la que levantan tan alto a pesar de que no soporten ya el dolor en los brazos.

La experiencia sirve para poca cosa a la hora de las artes amatorias, de los enamoramientos y los embobamientos del corazón. Y uno ve con bastante decepción que aquello que volvía loca a aquella especial mujer a esta nueva acompañante de cama no le provoca el menor entusiasmo. Así las cosas.

Hay un relato de Bukowski en "Peleando a la contra" (por lo que se trata de un relato autobiográfico) en el que un experimentado apostador sale del hipódromo acompañado por una bella mujer en dirección a un cuarto de hotel. Debía ser su día de suerte: bastante dinero fácil y la compañía de una bella joven. Luego del sexo, mientras el hombre está en la regadera la mujer sale del cuarto llevándose las abundantes ganancias con las que el hombre había llegado al cuarto de hotel. Toda una vida entre tahures y estafadores para caer ante el truco más simple de la historia: el acomedido pestañeo de una bella mujer que aparenta un legítimo interés en tu persona.

Dice Cortázar en "Rayuela": la razón sólo nos sirve para disecar la realidad en calma, o analizar sus futuras tormentas, nunca para resolver una crisis instantánea. No creo que haya mucho más que decir.

Por ello me resulta tan risible el argumento de la experiencia como factor de peso ante casi cualquier situación, sobre todo en deportes; porque en realidad, la experiencia sirve para poca cosa. Para acumular frustraciones y memorias pasadas, para eso, sí. Para elaborar grandes discursos, también.



4 comentarios:

  1. No puedo estar más que de acuerdo... la experiencia sirve sí; pero en cuestiones emocionales se complica un poco la cosa.
    Un abrazo Gildardo

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    1. Pienso que sirve más para llenar el currículum o contar historias que para otra cosa.
      Abrazos.

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  2. Yo creo que las experiencias sirven en varias áreas de la vida y casi nada, siendo generosa, en las cuestiones amatorias.
    Un gran abrazo y beeesos, querido Gildo.

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    1. Pienso que podrían servir en un sentido negativo, para suspicacias y malentendidos.
      Abrazos y beeeesos Mire querida.

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