miércoles, 29 de enero de 2020

tres años

Cuántas cosas pueden pasar en tres años. Un joven puede completar sus estudios de secundaria o preparatoria siendo un alumno regular. Se puede estudiar una licenciatura express, sabatina o ejecutiva, dependiendo del lugar en donde se haga. Se puede también pagar un auto comprado a crédito, aunque al terminar de hacerlo el vehículo cueste mucho menos de lo que se ha desembolsado por él.

A cuánta gente nueva se puede conocer, en el aspecto más vacío de la palabra, en treinta y seis meses. Con cuántas miradas deseosas se puede uno cruzar mientras se camina por la calle o se espera el autobús, cuando se hace la fila del banco o se escogen las verduras en el supermercado. A cuánta gente de debe conocer forzosamente ante el empeño del amigo que no puede entender que lleves tantos meses en la, para él, más devastadora soledad. Será que cada vez hay más gente que no soporta estar con ellos mismos.

Cuánto podemos cambiar en tres años. Evolucionar. Darnos por vencidos. ¿Cuánto rencor o esperanza se pueden acumular en nuestros abismales corazones? Cuánto se puede afianzar un amor, tomando el territorio a perpetuidad, degollando cualquier atisbo de interés sexual más allá de la satisfacción carnal y momentánea. ¿Cómo se va tejiendo un parasiempre?



11 comentarios:

  1. con mucho trabajo se puede ir tejiendo. Igual lo de "para siempre" suena a mucho no? ja...

    saludos, me quedo por acá

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es mucho pero puede ser tan poco, y tan incierto.
      Un abrazo, gracias.

      Eliminar
  2. En tres años y en mucho menos, en casi un instante puede dar un vuelco total la vida.

    Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Bueno, sí, en un instante da la vuelta, pero que dure tres, cinco años esa vuelta es distinto :)
      Abrazos.

      Eliminar
  3. Tres años dan para todo o para nada. Como dice Amapola, la vida puede dar un vuelco en un solo instante o permanecer vacía para siempre.
    Yo me preguntaría si en esos tres años (o el tiempo que decidamos examinar) he hecho lo que quería o no. Si la respuesta es no, seguramente haya algo que revisar.

    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues serán también tres años en el diván, así que, en ese aspecto bastante ha cambiado aunque parezca a veces que nada lo ha hecho.
      Gracias por la compañía Alís.
      Abrazos.

      Eliminar
  4. Tres años pasan en un soplo, sin darnos cuenta, y dentro de ese espacio de tiempo nos pueden ocurrir muchas cosas importantes que nos dan vuelta la vida, o solo un montoncito de días grises que se acumulan detrás de nuestra espalda y dejan una sensación de vacío.
    Siempre hay que buscar algo que nos haga sentir vitales y no siempre puede ser una pareja. Los "para siempre" no existen en ningún orden de la vida. Somos mortales.
    Me gustaron tus elucubraciones, querido Gildo.
    Beeeesos y abrazos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me gusta eso del montoncito de días grises, quizá le de la vuelta en unos versos. Es tan cierto que en nuestra relativización del tiempo cada vez nos parece que los días se suceden con más prisa, pero es sólo nuestra mediocre percepción, o los anhelos rotos.
      Creo que sí existen parasiempres, pero son todos tristes.
      Te abrazo muy fuerte amiga querida.
      Beeeesos.

      Eliminar
  5. Me encantan tus pensamientos.Todo puede cambiar en un instante. Abrazos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Eso me hace sonreír Betty. Muchas gracias por la compañía.
      Abrazos.

      Eliminar
  6. Iba sobre el sentido contrario del término, pienso algo parecido de los que tú señalas Julio.
    Abrazos.

    ResponderEliminar