Dicen que los corazones
se hicieron para romperse.
Es difícil de creerse
para cariños simplones
de amor sin preocupaciones.
Bueno, estoy exagerando,
y de amor no estoy hablando;
hablo de un cierto cariño,
del sentir de cualquier niño
que no ve a qué está jugando.
Amorcitos desechables
de tequieros inmediatos,
tornan cariños ingratos
al sentirse indispensables.
Amores banalizables
de corazones miedosos,
sentimientos pudorosos
que se dan sin entregarse,
no vaya uno a estrellarse
bajo cielos tormentosos.
Y mueran las fantasías
quebrando los corazones,
proveyendo mil razones
de prevenir agonías;
y enterrar las alegrías
antes que se hagan pedazos.
Y queden sólo retazos
de un corazón indefenso
con un temor tan intenso
¡Qué lindo volver a leerte en poesía, querido Gildo!
ResponderEliminarMe gustó mucho y coincido con unos cuantos conceptos.
Abrazote y beeesos.
Mucho más lindo para mí verte aquí mi queridísima Mire. Quiero suponer que estás bien, o lo suficiente para andar acá. En verdad me alegra muchísimo.
EliminarPues de repente llegan los versitos, las ganas de escribirlos. He escrito algunos en las últimas semanas.
Te abrazo muy fuerte querida amiga.