Igual no estamos tan viejos para dejar de sonreír. Para cantar a voz en cuello, para sentir lindo a un mínimo roce; para ilusionarnos con la posibilidad de amor.
Seguro que la luz de nuestros ojos se ha ido apagando, que ya no brillan como en esos días de pubertad; y la memoria, ¿para qué hablar de ello?
Vivimos un presente perpetuo, como si un día fuera tan normal como el siguiente.
Pero no lo es.
Aquí estamos y sonreímos.
siendo mas viejos y mas sabios si es que fuimos inteligentes, sabemos que no nos queda otra que ser optimistas... saludos
ResponderEliminarEso es tan cierto. Hay que ser optimistas y poner de nuestra parte. Es la cosa de volverse viejo, que se va uno volviendo sabio.
EliminarAbrazos.
Siempre estamos a tiempo para amar. O eso espero.
ResponderEliminarUn abrazo
Sí, siempre. Algunos siempre o estamos, a pesar de todo.
EliminarAbrazos Alís.
Nunca es tarde para amar,
ResponderEliminarpienso yo.
Besitos dulces
Siby
Así lo creo. Un abrazo.
EliminarHay quien diría que la vida sigue igual, como dice la canción de Julio Iglesias. Pero no, la vida sigue en función de cómo estemos nosotros. Así que será mejor mantenernos sanos y alegres.
ResponderEliminarUn abrazo.
Es verdad Josep. Espero tu familia esté bien.
EliminarAbrazos.
El amor no entiende de dolores, vejez ni memoria. Está siempre ahí, puede que cambie de forma, pero nunca deja de existir.
ResponderEliminarUn abrazo.
Creo que para algunas personas es así Sofi, pero no creo que para todos.
EliminarTe abrazo.
Sí, lo es, pero a algunos no nos resulta tan difícil de hacer. Es increíble enamorarse nuevamente.
ResponderEliminarAbrazos buen amigo.