¿Qué me pasó?
Cuántas veces me he hecho la misma pregunta sin poder llegar a una respuesta satisfactoria. Demasiadas. Sobre todo después de aquellas sesiones de diván, de aquellas duras y reveladoras sesiones.
Sólo sé que una bola de nieve comenzó a crecer en algún momento. ¿Cuándo? No lo sé, no lo recuerdo. Pero la inmensa bola que es ahora se sigue desparramando sin visos de poderse detener.
Esa bola arrasará lo que tenga que arrasar y quedará lo que en efecto vale la pena ser sostenido
ResponderEliminarSuerte,
J.
Nos enfriamos, nos endurecemos con el paso del tiempo y con las experiencias que vamos teniendo. Darse cuenta ya es un paso para intentar cambiarlo.
ResponderEliminarY que los que no tienen culpa de nuestro pasado acaben pagando los platos rotos.
Beso grande.