viernes, 8 de diciembre de 2023

cosas


Estaba con un amigo en una plaza comercial donde hay un Starbucks, del que entraban y salían personas con su café, personas que sólo iban por el café y se iban del lugar. Le comenté a mi amigo lo ridículo que me parecía esa forma de despilfarro de la gente, él argumentó algo sobre que ese café era especial. Aunque más que lo maravilloso que pueda ser ese café, es la sensación de sentirse especiales la que hace a tanta gente pagar tanto por algo que no lo vale. Pero ya entendí que ellos compran otra cosa. ¿Apenas?

Lo que me resulta inentendible. 

Pero supongo que es esa misma gente que presume lo endeudada que está, y también parecen sentirse especiales al hacerlo. Y los males de muchos, pues...

También prefieren ir a un lugar caro y beber alcohol caro, teniendo que escuchar la horrible música de moda y a toda la gente que esté ahí. Cuando puede uno comer y beber y escuchar lo que a uno le plazca en el volumen que uno prefiera en la casa de alguien. 

Pero esto no atrae a nadie, a casi nadie.

Cosas del mundo moderno.

4 comentarios:

  1. El postureo está de moda y una imagen vale más que mil palabras. Hay quien vive de su imagen, aunque sea falsa.
    Un abrazo.

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  2. Es el sentido de manada, de que si va uno, por qué no yo. No importa que el café de mi casa o de un cafecito pequeño sea mucho mejor, pero si todos van allí y pagan por sentarse allí...somos tan especiales.
    Abrazos Gildardo, que de gil no tienes nada. En mi país (Chile) le decimos "gil" a las personas tontas o torpes.

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  3. Eso no es café, es agua caliente y sucia. Y no siempre lo suficientemente caliente.

    Saludos,
    J.

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  4. Mejor un cafecito en cualquier cafetería familiar. Esa multinacional, como muchas otras vinculadas a la agroindustria global, controlan, manejan, manipulan y dañan la agricultura tradicional. Busca en Internet y verás todo lo que hay detrás. Un saludo.

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