lunes, 6 de septiembre de 2021

hablar

Creo que podría decir que soy un bocafloja, que es un término que recuerdo de los programas de televisión de la infancia, en traducciones hechas no sé dónde; porque no recuerdo haberlo escuchado aquí, en vivo y a color. Y me refiero a tener la boca dispuesta a hablar, y no lo contrario, como podría pensarse al confundir la acepción del floja de flojera con floja de soltura. 

Pero a lo que me refiero es a que me resulta bastante fácil abrir la boca para decir lo que pienso, así sea lo más políticamente incorrecto o lo más polémico. Y no sé qué me da más satisfacción, si generar incomodidad o sentirme libre de decir eso que pienso. Tampoco sé si esta actitud se deba a un contraste con quien era yo de pequeño, callado y temeroso.

Aunque pienso que me siento seguro en mis alardes porque me creo con el conocimiento necesario y la seguridad para sostener eso que digo, que aseguro o que propongo, a veces de la forma más socarrona que conozco.

Pero bueno, me he llegado a dar cuenta de que esto es una parte muy grande de quien soy. Es parte de mí, de este tipo narcisista y contradictorio. 

Y sí, al menos también he aprendido a quedarme callado, por más difícil que me resulte guardarme eso tan maravilloso que podría decir.




4 comentarios:

  1. A veces resulta difícil ser comedido y no hablar de más. La sinceridad es, muchas veces, una virtud que puede convertirse en defecto si lo que uno dice ofende al interlocutor. A mí también me gusta decir lo que pienso, pero intento medir mis palabras según quien tengo delante, pues en más de una ocasión me he extralimitado sin querer y luego me duele haber dicho lo que he dicho, o cómo lo he dicho.
    Un abrazo.

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    1. Te entiendo mi amigo, pero yo con ciertas personas medio medievales siento un impulso mayor por incomodarlos y hacerles ver, quizá, que lo que piensan es de naturaleza cavernícola.
      Abrazos.

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  2. Aqui acuerdo en parte con el comentario anterior. Creo que hay virtudes que segun la ocasion y el contexto, pueden transformarse en defectos.
    Es maravilloso poder expresar lo que pensamos, de hecho en estos espacios lo hacemos , pero a veces hay temas delicados en donde la mayoria d elas personas tienen menos tolerancia para "la escucha" y menos aun para la aceptacion de una opinion diferente..En esos casos, creo que conviene hacer silencio. Un abrazo

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    1. Como le decía a Josep, hay personas que invitan a hacerlo. Como hablar frente a un musulman de lo pobre del desempeño sexual de un hombre frente a su idea que poseer varias mujeres, o alguna otra idea retrógrada de esa religión.
      Abrazos.

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