Es que en un mundo en que puedes llamarte artista por embarrar pintura sin ningún criterio o por escribir cualquier sandez aludiendo que lo has sacado de tu corazón, y llamarte poeta o escritor, e incluso recibir halagos de cientos de ignorantes (adjetivémoslos correctamente); o por colocar cualquier cosa sobre cualquier otra y adjuntarle un textillo que diga lo que quisimos representar con el bodrio aquel; algunos nos resistimos a dejarnos llevar por la mediocre corriente que todo lo iguala. Esa que dicta que si es de noche todos los gatos son pardos.
No es así, basta mirar con detenimiento para poder ver las diferencias entre ellos. Pero hay que mirar, tomarse un tiempo, en tiempos en que parece inadmisible perderlo (usarlo) esperando.
Hay que defender el arte. La verdadera creación artística, esa en la que dejas un pedazo de ti indefectiblemente en él. Hay que defender el esfuerzo y la dedicación, la búsqueda de conocimiento y la práctica deliberada. Ese tratar de hacer algo de la mejor forma de la que eres capaz hasta ahora. Porque esto como pocas cosas, casi siempre es recompensado: dibujas mejor, cantas mejor, pintas mejor, sabes más, escribes mejor.
¿Cuántos están dispuestos a pagar el precio si pueden ser "artistas" con casi nada?
Batman siempre nos trae la verdad.
ResponderEliminarArte conceptual, sí claro...
Saludos,
J.
Batman siempre nos ilumina, jajajaja.
EliminarAbrazos.
Lo que he visto como el colmo del absurdo es lo de aquellos cuadros totalmente blancos que vendieron en quién sabe qué obscena cantidad de dinero. Qué "arte conceptual" ni qué nada.
ResponderEliminarSí parece ser el colmo, pero quizá veamos peores ridiculeces.
EliminarAbrazo.
Me gusta leerte y a eso he venido
ResponderEliminarTe dejo mis mejores deseos hoy cuando la vida no es facil de vivir
saludos
Gracias.
EliminarAbrazos.
Las cosas que se ven en estos tiempos. Aquello del traje nuevo del emperador parece poca cosa frente a tanta idiotez.
ResponderEliminarAbrazos Julio.