viernes, 1 de abril de 2022

tiempo y poemas

 Entre el tiempo y los poemas
te estoy matando de a poco,
de aquel infinito amor
sólo quedan los despojos;
la fantasía que escribí
se asfixió dentro de un pozo,
la certera realidad
me dijo: ¡despierta loco!

Creo que estoy exagerando,
despojos es decir mucho.
Voy derribando paredes,
quedan tantos sueños diurnos
en este castillo inmenso
que llené de tus murmullos,
con tu risa, con mis manos,
con nuestro futuro juntos.

La fantasía penetró
se filtró sin dejar grumos,
todo el cuento me tragué
refugiado entre tus muslos;
y al destino agradecí
que nos obsequiara un trunfo,
que te ponía frente a mí
que me transformaba en tuyo.
Que nos miraba sin más
y nos daba un pago justo.
Para enderezar mi vida
para calibrar mi rumbo,
intentar verte feliz
matando temores nulos.
Dos perdedores que así
retaban juntos al mundo.

Ves, no fue descabellado
colgarte de un parasiempre,
cargarte mis esperanzas
sentir algo trascendente.
Sabes que desde un principio
todo fue tan diferente,
¿por qué no soñar despiertos?
soñábamos seriamente.
Y creímos que la vida
nos sonreía cortésmente,
sin pedirnos las facturas
sin mirar si fuimos crueles,
sólo dejándonos ser,
siendo muy benevolente.

No te he matado ni un poco
sigues tan fresca en mi mente.


2 comentarios:

  1. Hay que buscar la forma en que los poemas se conviertan en tiempo, para no seguir confundidos.

    Saludos,
    J.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Quizá no te entiendo del todo, me parece al revés, el tiempo se convierte en poema a veces; si hay algo de suerte, en uno que no sea tan malo.
      Abrazos.

      Eliminar